viernes, 11 de diciembre de 2009

René Magritte, o cuando la imagen y la palabra son una misma cosa



René Magritte, este particular artista belga, ligado por amistad al núcleo duro de los surrealistas (aunque nunca se situó entre el número), pintó en algún minuto esta obra titulada Le mal du pays, expresión de la lengua francesa intraducible -en forma literal-, pero que alude al sentimiento de la nostalgia, de añorar o extrañar profundamente. Los invito a compartirla y a comentarla, ojalá también a indagar y mirar otros trabajos

10 comentarios:

  1. Interesante...
    era del movimiento del surrealismo,cierto?
    recuerdo que me toco hablar de el en
    una de las clases con Mr. Cristian Vera!
    esa vez yo expuse de la pintura
    LOS 6 ELEMENTOS! esa realmente me gusta!
    la buscaré! ajajaja

    ResponderEliminar
  2. La pintura no es de mi gusto. No logro conectar con el sentimiento de nostalgia, precisamente por las dos cosas que llaman la atención inmediatamente al ver el cuadro: el león y las alas. Sin eso, perfectamente adquiere un carácter nostálgico. Pero claro, ya no sería surrealismo (y cualquiera podría decir que se trata de la calle Juan Antonio Ríos, en Coquimbo).

    Del mismo autor, me parecen interesantes obras como "Les amants" y "La chambre d'ecoute"

    ¿Alguna réplica?

    ResponderEliminar
  3. Se me vienen a la mente la palabra resignacion y paz.
    Es para mi como una metamorfosis: el hombre se convirtió en león para luchar con la adversidad de la vida, como si fuese su enemiga, pero encontró el equilibrio, y abandona su bestia y se convierte en un soñador con alas deseoso de volar.

    ResponderEliminar
  4. Con respecto al comentario de la usuaria Ivannia, hay algo que me parece un poco contradictorio, acaso estoy yo equivocado.

    Relacionar al león y al "soñador alado" (para llamarlo del mismo modo en que ella lo hizo) sí demuestra un "equilibrio", un balance entre dos figuras normalmente opuestas (o que tenderían a representar lo opuesto).

    Ahora bien, si aceptamos como se propone, que la persona encontró el equilibrio, la paz, el balance, etc. no es concebible entonces que tenga DESEOS de volar, pues eso ya rompe el equilibrio inclinando nuevamente la balanza hacia un lado (el lado del soñador alado, claro está). De haber sido así, era de esperarse que la pintura contuviera al tipo volando; pero no. De hecho, si analizamos la posición corporal, no hay indicios de que tenga ganas de volar. Todo lo contrario, parece indicar más bien que está absolutamente cómodo, sumido quién sabe en qué reflexiones.

    Por otra parte, si nos fijamos en el león, éste también se encuentra en una postura pasiva, de relajo, sin el mínimo asomo de querer atacar o mostrar fiereza, descartando entonces, en medida de lo aceptable, esa oposición tan "drástica" que representa la lucha contra la adversidad de la vida.

    ¿No parece razonable?

    ResponderEliminar
  5. Parece razonable si mi interpretacion de la pintura es lo que tu interpretaste de lo que yo dije... y no lo es. Me referia a otra cosa. No me entendiste o no me explique bien
    No tengo gnas de explicarlo mejor... total, da igual. No era un debate.
    Ademas, de eso se trata el arte... es completamente subjetivo... cada uno lo interpreta como quiere y cada interpretacion puede ser absurda segun el otro.

    ResponderEliminar
  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  7. No te explicaste bien.

    Y sí, el arte tiene su dejo de subjetividad ¿qué tanto? Eso ya sería entrar en otro debate.

    Ninguna interpretación es absurda, una interpretación simplemente es eso; los calificativos son los absurdos.

    Finalmente, los razonamientos que expuse, son correctos siguiendo su línea, no asumiendo nada. Leamos bien.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  8. Ash, la pintura de Magritte, en general es una propuesta contra la interpretación, las admite a todas, por ende, a ninguna...me quedo con esa conmoción entre discurso (título) e imagen, eso que permanece en suspenso...

    ResponderEliminar
  9. El León, rey de la selva, animal por naturaleza agresivo e intimidante por su fuerza y poder, se muestra apacible, indiferente, ante el ser que busca la libertad contemplando el vacío y que ronda en su mente la idea de dar el gran paso y dejar todo atrás .... El Leon que representa a su indiferente amada ... Y saltar libremente al vacio un opción de decir adiós

    ResponderEliminar
  10. En mi humilde opinión, me parece que el hombre oscuro alado representa ese sentimiento, esos momentos en los que imaginamos una mejor vida, de querer cambiar, mejorar, de tener el valor de saltar a ese vacío que nos impide volar; y el león imponente, seguro, casi en paz, representa el conformismo que nos ata y mantiene inmutables ante la realidad y que muchas veces tenemos abandonar por el conformismo. Eso se llama nostalgia.

    ResponderEliminar

Seguidores